Qué pasó con las oficinas durante las cuarentenas y cuáles serán los efectos de la pandemia en esta industria. “Sin dudas, esas son las grandes preguntas que los inversionistas y el mercado, en general, se están haciendo hace semanas en un contexto de paulatino desconfinamiento y regreso presencial a los espacios de trabajo”, explicó Gustavo Valenzuela, Director de Brokerage de Cushman & Wakefield Chile, quien aborda este tema en la siguiente columna.

En esa línea, hay que recordar que la estructura de los contratos de arriendo en Chile es bastante rígida e impide romperlos unilateralmente. Por lo tanto, si bien en estos últimos meses se han visto algunas terminaciones y devoluciones, lo que ha destacado con fuerza es el ingreso de una oferta de superficies en subarriendo, donde el arrendatario pone en subarriendo una porción de la oficina para la cual él tiene un contrato a mediano-largo plazo.

Lo que viene para el segmento inmobiliario corporativo, por su parte, va a depender de las decisiones que las empresas vayan tomando en cuanto al retorno presencial y a las modalidades del trabajo y, en ese marco, creemos probable que el fenómeno del teletrabajo se mantenga e impulse el ajuste de los espacios de las oficinas.

Puede que esta tendencia del home-office sea adoptada por más y más compañías, las que requerirán implementar diseños flexibles de sus oficinas lo que, eventualmente, se traducirá en menor necesidad de espacio. Si esto se concreta, podríamos ver un impacto en los precios de esta industria, aunque mayormente en las concesiones que otorguen los arrendadores a los arrendatarios como, por ejemplo, más meses de gracia, financiamiento y facilidades para poner término a los contratos.

De todas maneras, aunque todavía hay que ver la evolución de la crisis sanitaria y el fenómeno social en Chile, en general, el mercado de oficinas premium en Santiago es bastante concentrado con números muy sanos. Recordemos que la vacancia entre enero y marzo fue de 4,4% y que, a pesar de la crisis social y la pandemia, registró solo un leve incremento a 4,67% para el cierre del siguiente trimestre. Es cierto que en el periodo julio-septiembre este indicador llegó a 5,25% -su nivel más alto en 2020-, no obstante, sigue estando debajo del punto de equilibrio en torno a un 7%.

Como se ha visto en períodos históricos complicados, como la crisis sub prime en el 2008-2009, lo que podría suceder probablemente es un aplazamiento de proyectos de edificios de oficinas, ya que los tiempos involucrados en la realización de éstos son lo bastante largos para permitir a los desarrolladores observar los fenómenos sociales y adaptar su oferta en forma y plazos, de manera de mantener una vacancia sana y precios consistentes.

Fuente: EMB Construcción